Un Viaje hacia la Vida

Te invito a un viaje, que te propongo que llamemos Viaje, para diferenciarlo de cualquier viaje convencional que pueda hacerse en el transcurso de la vida.

Para este Viaje, lo primero que tenemos que decidir es adónde deseamos, cada quien, llegar. Es decir, el resultado del Viaje.

Te propongo, además, que ese resultado sea algo donde nunca antes llegaste aunque lo desearas, que sea un “imposible” para ti.

¿Por qué algo imposible? Porque nada es imposible si usas las coordenadas correctas. Y para demostrártelo el resultado es la excusa para que en lugar de hacer un viaje, hagas el Viaje más importante de tu existencia, uno que implica, también, un Viaje interior que cambiará tu vida, mejor dicho, que la Iniciará.

Al dirigirnos a un resultado, desde donde partimos y hacia donde nos dirigimos, está predeterminado. Es decir, aún cuando crees estar emprendiendo algo nuevo que desembocará en algo diferente, algo en ti, desde antes, decidió adonde y hasta dónde vas a llegar. 

¿Por qué? 

Nuestro psiquismo tiene una configuración pre establecida. Lo que consideramos que es posible, imposible, necesario o contingente en nuestras vidas, no va a tener que ver con lo real, sino con las verdades desde las que partimos. Verdades que nos pre existen y tienen que ver con los paradigmas imperante que nos dicen que es verdad y que no (ciencia, economía, política y religión). Por la verdad desde la que partimos, nos dirigimos adonde confirmo mi verdad. Verdad que se argumenta en una convicción previa y no en un real.

Es decir, existe, en cada quien, un desde donde se parte que no es propio y un adonde me dirijo que tampoco es propio, sino que es un «adonde un otro espera que me dirija», un otro que ya no tengo que pensarlo como algo externo, sino como algo en mi. Es decir, un adonde del otro en mi.

Coordenadas del Viaje a considerar: 

Es fundamental que sea considerado e interrogado desde donde parto; y aquí tenemos la primera coordenada metódica: El desde dónde. Siguiente paso: Decidir desde qué verdad parto, desde dónde parto y entonces adonde me voy a dirigir: establezco un adonde propio para cada situación. Aquí encontramos la segunda coordenada: El adonde.  

El resultado y el por dónde llegar al resultado, son las otras dos coordenadas que considerar. 

En cuanto al resultado, al que me referí en la entrada anterior, es fundamental que cumpla los requisitos: ser denso, conmensurable y más allá del yo. 

¿Y el Adónde? ¿Y el por dónde? 

¡Este Viaje, recién empieza! Te propongo que si tienes dudas respecto a lo ya recorrido, me las hagas llegar a través del formulario. En una próxima entrada recorreremos tu propuesta y avanzaremos hacia las siguientes coordenadas Metódicas. 

Nota: Las coordenadas Métodicas son Enseñadas y profundizadas por José Luis Parise, creador de los 11 pasos del Método de la Magia.  

Por : M. Julia Achilli 

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